El Círculo de Embajadores Universales de la Paz con
sede en Ginebra (Suiza) y París (Francia), designan al escritor José Luis Labad Martínez, como su
representante en España.
¿Increíble verdad? Pues el martes, 17 de enero de 2017 a las
10:21, recibí la grata noticia del nombramiento, de que el Círculo de
Embajadores Universales de la Paz, organismo vinculado a las Naciones Unidas,
que tiene representantes en los cuatro Continentes, eligió por unanimidad como
Embajador Universal de la Paz en España, a este modesto escritor
y poeta en mérito a su actividad
con la infancia y la juventud y por su labor poética y literaria a favor de la
cultura y la paz mundial.
Esa designación fue aprobada, por la Presidenta de esa notable
institución de prestigio mundial, Dña. Gabrielle Simond. El referido organismo
cuenta en su seno con famosas personalidades de la política y la cultura del
Planeta como M. Robert Müller Ancien Secretario General Adjunto de la
Organización de las Naciones Unidas (ONU) Chancelier Honoraire University for
Peace ONU, Lama Gangchen, Maurice Bejart, Claude Lelouch, John Hallyday, Carlos
Garrido Chalen, Ernesto Kahan, Milagros Hernández Chiliberti, Marcela Vanmak,
entre otros.
La verdad es que esta nominación ha sido una agradable
sorpresa, pero no llego a entender como alguien ha podido tenerme en cuenta
para este nombramiento por mi trayectoria a favor de la infancia y la juventud
y por mis humildes poemas y escritos. Ha sido un nombramiento que me llena de
orgullo y satisfacción por el reconocimiento de mi labor durante tantos años y
me siento muy halagado por ello.
Mi trabajo con la infancia y la juventud siempre ha sido
desinteresado y sin buscar ningún beneficio material para mí o mi familia,
aunque para ser sincero, si me ha reportado unos beneficios espirituales
sumamente significativos. He sido galardonado con premios tan importantes por
mi labor, como son, la sonrisa de un niño o los rostros de gratitud de una
familia al prestarles mi ayuda. Con ello, me siento altamente pagado y premiado,
pues estos trabajos, son los que te hacen feliz y útil en la sociedad en la que
convivimos; ya que, si no disfrutas con ellos, no llegarás a ser dichoso con el
trabajo voluntario que realizas y no contagiarás tu alegría a los que te
rodean. Mis mejores tesoros son esos instantes, que juntamente con mi familia,
mis amigos y mi poesía, me hacen ser, uno de los seres más dichosos de este
mundo y si tuviera que volver a nacer y elegir mi futuro, seguro que elegiría
el mismo.
Pero no sería nada, ni nadie, sin todo lo que me han dado
cada uno de los hombres y mujeres que desde 1972 me han acompañado en el barco
de la Justicia, la Paz, el Amor, la Libertad y la Amistad, esas personas anónimas
que dan su vida cada día por los demás y que son, han sido y serán, esos
integrantes de la gran familia de la asociación Halcones de la Amistad, una
asociación que es la verdadera merecedora de este premio y de mi eterna
gratitud.
Gracias al Círculo de Embajadores Universales de la Paz, a su
presidenta Dña. Gabrielle Simond y a todas esa personas que han pensado en mí
para la nominación de este galardón, y en especial, a María del Carmen Aranda
por proponerme como candidato a tan alto honor. Y como no, a los miembros de la
asociación Halcones de la Amistad por todo lo que significan para mí y por ser
el corazón que nutre mis sentimientos.
Gracias de este humilde poeta de barrio.
Siempre
José Luis Labad
Martínez